Lxs compañerxs que conformamos La Juntada en Historia somos estudiantes de la carrera a quienes nos moviliza el deseo de transformar nuestra universidad: Intentamos poner en cuestión los contenidos y la forma en que estudiamos la Historia, la realidad de muchos docentes que nos dan clase sin cobrar un peso, la carencia de concursos docentes regulares, el funcionamiento del sistema de cátedras, la falta de un reglamento de adscripciones… Para transformar la Facultad y para hacer Historia es necesaria la participación activa de todxs a través del debate y la construcción concreta, con trabajo cotidiano y audacia. Junto a compañerxs no agrupadxs, canalizamos estas inquietudes a través de distintas iniciativas concretas: - Desde el 2012 llevamos a cabo un taller de producción de efemérides en Radio Sur (un medio popular comunitario), cuestionando la carencia de formación en divulgación histórica. - Organizamos desde hace un año talleres de Historia en el Centro Universitario de la cárcel de Devoto (CUD), convencidxs de que la Historia debe ser una herramienta para cuestionar y cambiar la realidad social más allá de las paredes de la facultad. ¡Te invitamos a participar en estas y otras iniciativas que impulsamos, a debatir sobre nuestra carrera y a pelear por transformarla! Este cuatrimestre realizaremos una charla apuntada a la orientación de lxs ingresantes a Historia y una actividad en relación a la Primera Guerra Mundial ya que este año se conmemora el centenario de su inicio. Por último, entendemos que la movilización y la lucha en nuestra universidad deben plantearse como objetivo la democratización de los órganos de gobierno, paso fundamental para avanzar en las transformaciones profundas que necesitan nuestras carreras.
Democratización: Ayer, hoy y siempre.
Plan de estudios ¿¡Que treinta años no es nada!?
Francamente, suena muy raro que un Plan de estudios cumpla ¡30 años! A lo largo de los últimos diez años, y como consecuencia de la lucha y participación del movimiento estudiantil y docente de Historia, se consiguieron importantes avances para romper con el pensamiento único a través del surgimiento de numerosas cátedras paralelas. Ahora bien, lejos estamos de haber avanzado sobre una reforma completa que nos permita superar las falencias de nuestra carrera y poder aportar una mirada global a nuestra disciplina y a su práctica concreta. La falta de herramientas teóricas interdisciplinarias que nos permitan elaborar ideas propias y no simplemente copiar y pegar las que han aportado otros; la invisibilización de las mujeres en los procesos históricos; la poca cantidad de materias optativas que permitan una especialización sobre un tema en particular; la inexistente preparación para la práctica de investigación y el trabajo con fuentes; y la miserable formación docente, son algunos de los problemas centrales de nuestra carrera, producto de su anacrónico plan de estudios. Esto se traduce en la formación de un determinado perfil de graduadx que no cuenta con herramientas necesarias para investigar, tampoco para la docencia y que termina obligado a resolver esas falencias por cuenta propia. Entendemos que el problema es esencialmente político: la forma en que se construye y se organiza el conocimiento dentro de la carrera está fundamentada en una lógica de la preservación de la quintita propia y de la más absoluta mezquindad del claustro de profesorxs. Desde La Juntada en Historia entendemos que esta es una excelente oportunidad para transformar lo que deba ser transformado. No tenemos soluciones mágicas, pero sí la voluntad política para debatir junto con toda la comunidad académica el nuevo plan de estudios que Historia necesita.
No hay comentarios:
Publicar un comentario